Una de las cosas que más me llama la atención de Seattle es la cantidad de vagabundos que hay. Hay mucho "tirao", "colgao", y vagabundo. Todos tienen pinta de ser inofensivos. Cerca de nuestro hotel hay una calle que hay mucho "tirao", fumando algún tipo de droga dura (¿el crack se fuma?), pero en principio parecen inofensivos. Como he dicho también hay mucho colgao. Por el centro de Seattle (el Downtown), iba un tío por la acera con la bici cogida del manillar, eso sí, en calzoncillos. Todo "normal", sino fuera porque yo creo que esos calzoncillos eran con los que hizo la primera comunión (amarillos como la documentación del C-212).
Los vagabundos se ponen en los cruces con carteles pidiendo limosna a los coches que pasan. Es una auténtica pena:
El camino de vuelta tiene unas vistas muy chulas. Os pongo una foto de los barcos del lago:
Por último, una foto del Rainier. La vista del Rainier en la lejanía es espectacular. Intentaré hacer fotos mejores de este monte:
No hay comentarios:
Publicar un comentario